DAPHNE AKRISIOS
21 Años, Estudiante de Ciencias Políticas // Casa Afrodykis
HISTORIA: La rebelde hija única de unos padres dedicados desde siempre a la política, a Daphne siempre le ha encantado llevar la contraria en todo; que sus padres son políticos, bueno pues la política apesta, los políticos son unos corruptos y de pronto le encantan las manifestaciones, especialmente esas de ''salvad a las ballenas, el atún rojo o el urogallo'' sea lo que sea eso último. Todo lo que sea armar follón, ella se apunta, aunque también tiene que ver el hecho de que siempre ha sentido debilidad por los animales hasta el punto de trabajar como voluntaria en perreras o llevarse a casa a más de un gato callejero enfermo, además, desde que comenzó a hacer uso de razón, Daphne ha sido una ecologista empedernida: recicla y obliga a reciclar a toda la gente del barrio bajo amenaza de insistir día y noche (es bastante cabezota y no hay quien pueda con ella). Lo que es un misterio para muchos es cómo una auténtica hippy y orgullosa miembro de Greenpeace estudia una carrera como es la política, ¿no se suponía que ella odiaba todo ese rollo? Pues sí, lo odia al igual que odia casi todo, pero todo el mundo sabe que los políticos son poderosos y no hay nada que le guste más que ejercer poder sobre la gente, además tiene grandes planes de futuro, ¿convertirse algún día en la matriarca de su casa, llegar a ser alcaldesa o algo así? Ni hablar, todo eso se la queda pequeño... Dominar el mundo, como mínimo, si alguien puede esa es Daphne.
PERSONALIDAD: Si hay algo por lo que destaca Daphne es por ser inteligente. Por eso, y porque la mayoría del tiempo usa su inteligencia para joder a la gente a su alrededor; no al azar, no es que le guste hacer el mal sin motivo alguno, tan sólo disfruta atacando a aquellos que se lo merecen, que es más o menos el 99% de las personas, porque para ella la estupidez al igual que la crueldad humana, o semi-humana si quieres, no tiene límites. La gente apesta, o eso es lo que ella cree, así que lo único que necesita es un mínimo motivo para hacerle la vida imposible a alguien. Ni que decir que es una auténtica dictadora y que le encanta tener todo y a todos bajo control, eso si, prefiere utilizar su inteligencia para manipular a la gente sin que se de cuenta antes que hacer uso de su poder; y es que el ser una vástaga de Afrodita es algo que siempre ha considerado una maldición ya que es de esas personas que creen firmemente en que el intelecto está muy por encima de la belleza (o en otras palabras, no hay nada que más odie que la gente guapa y descerebrada).
● No imagina su futuro con marido e hijos, sino con perros y gatos.
● Puede presumir de haberse enrollado con docenas de tíos, pero jamás se ha acostado con ninguno; nadie ha llegado a gustarle lo suficiente y aunque se niegue a reconocerlo en el fondo es bastante romántica en ese aspecto.
Imagen: Michelle Trachtenberg // Llevado por: KIRA
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